¿Te has quedado observando a una persona y te has visto reflejada en sus ojos?
¿Has sentido un suave cosquilleo cuando te hablaba y has quedado prendada sin una sola palabra qué decir?
¿Has rogado a quién fuese para qué por unos minutos paralizase esos momentos que podrían ser descritos como mágicos?
¿Te
ha faltado el aliento al saber que estaba lejos y en cambio has sentido
un atisbo de felicidad cuando volvías a estar enfrente de esa persona?
Acariciándola,besándola, sintiendo que sois solo uno.
Lamentablemente,
tengo qué decir que yo no lo he vivido, pero lo he visto. He tenido la
oportunidad durante más de un año en ser testigo del amor que se profesan María y Alberto, conocidos cariñosamente como los "promes".
En
pocas horas, serán marido y mujer en su ciudad natal, Barcelona. No
existe mejor escenario para ese momento. No tengo ninguna duda
qué María será una novia guapísima, que la ceremonia será preciosa y que
los
presentes serán testigos de un amor que si no me equivoco comenzó hace
ocho años.
Este
último, ha sido un camino duro para los
dos. Miles de kilómetros, frío y lluvia, retos profesionales, más frío y
lluvia. Pero todo eso ha quedado atrás,
porque hoy se mirarán a los ojos y verán que todo esto, ha merecido la
pena.
Vais a pensar que estoy loca y que estoy ciega al no ver los problemas que surgen en la actualidad debido a esos billetitos de colores que tantas satisfacciones nos pueden llegar a producir cuando los tenemos.
Pero en este caso, me gustaría hablar sobre lo que dinero no llega nunca a provocarnos y podemos conseguir sin él.
El domingo pasado, mi amiga Inês, portuguesa y compañera de trabajo me había comentado si quería participar como voluntaria en un Festival de Época Romántica en nuestra ciudad. Es un festival de música clásica dónde todos los asistentes van vestidos de época.
El año pasado también asistimos y nos tocó vender helados. Este año nuestras tareas eran diferentes, entre las que se encontraban vender lotería o vender entradas de cine. Aunque el trabajo no era muy excitante, la experiencia de poder conocer gente y poder compartir durante unas horas con los roterdamés fue incalculable.
No me entendáis mal. No digo que hay que trabajar de gratis. Para nada quiero ahora promulgar el trabajo esclavo. Al revés, pienso que el trabajo debería estar remunerado y lo que le falta a la sociedad es esa desigualdad a la hora de designar los salarios. ¿Por qué unos ganan tanto y otros tampoco? Injusto. Sólo es que a veces tenemos la idea errada de que somos lo que producimos en la vida cuando en realidad creo que somos lo que podemos extraer de ella.
Cuando estuvimos en el festival, muchos amigos nuestros se acercaron a visitarnos y la típica pregunta era ¿Porqué lo haces si no os van a pagar?Eso me hizo pensar en cuántas cosas nos perdemos en la vida por no "recibir nada a cambio".
Creo que el dinero está sobrevalorado. Existen millones de personas que ganan muy poco mereciéndolo y sólo sobrevivien y en cambio otras se creen superiores por el hecho de los ceros que existen en su nómina. Yo no jugzo la profesionalidad de una persona por lo qué gana. Nunca lo he hecho ni nunca lo haré. En este mundo qué se guía por la oferta y la demanda sería muy injusto pensar que somos lo qué ganamos. Entre mis compañeros de trabajo, adoramos algo por encima de la comida, aunque eso es díficil: el debate. Todos los días sale un tema a relucir y nos ponemos a discutir, incluso a veces con uno tono más alto que otro. Hace una semana estabámos en la hora de la comida y de pronto salió un tema muy interesante sobre lo qué significa la felicidad y los valores para cada uno de nosotros. Pensé en mi madre cuando me dice que valore el trabajar en equipo y que lidiar con personas qué piensan muy diferente a mí me va a enriquecer, porqué a la vez voy a aprender a respetar las opiniones de los otros y a lo mejor a cambiar o reafirmar las mías propias. El dinero se gasta, incluso muchas veces se malgasta, por tanto no deberíamos ser tan dependientes de él. En cambio existen valores, experiencias que no se pueden tocar, pero permanecen en nosotros para siempre. Os dejo algunas de las fotos del FESTIVAL ROMÁNTICO DE ROTTERDAM.
Romantic Festival en el Euromas, Róterdam
Roterdamés muy peculiar, lleva 20 años vistiendo sólo de color rosa
Dejando un recuerdo fotográfico del festival
Probando uno de los accesorios de la tienda de tocados
Una de las mini-tiendas italianas
Mini-tienda de chocolate (zapatos de chocolate a medida)
Uno de los conciertos de piano
Nuestra recompensa (vino Rueda español)
Este vídeo es dedicado a vosotras. Siempre qué escucho esta canción, me acuerdo de buenos momentos.
Qué debido al tiempo en Holanda a veces nos vemos "obligados" a quedarnos en casa, es cierto. Quién lo niegue es qué nunca ha vivido en un país dónde llueve el 80 % del tiempo y en invierno hace tanto frío que si nos olvidamos de los guantes estamos destinados a perder los dedos.
Pero lo qué voy descubriendo en Rotterdam es qué hay multitud de actividades relacionadas con el baile. Aquí no te cansas de oír que muchas parejas asisten a clases de salsa, tango o incluso se atreven con ritmos más atrevidos como la kizomba, un tipo de baile muy sensual que empezó a componerse en los años 80 en Angola, colonia ex-portuguesa. Un ejemplo, podría ser el siguiente:
Hace una semanas, asistí con unos amigos al Cuartito Azul, una sala de baile montada por un grupo de argentinos para recibir una lección para principiantes de swing, baile americano de los años 20.
Para la ocasión, no fuimos muy apropiadamente vestidos que se diga. Aquí la servidora, parecía que iba a correr o al gimnasio en vez de bailar. Siempre me doy cuenta que no puedo salir de casa sin llamar un poco la atención. La primera hora nos colocamos en círculos y dos profesores nos iban explicando los pasos básicos. Parecía fácil pero no lo fue. Había chicos que llevaban muy bien el ritmo, pero otros, igual mejor se hubiesen quedado en casa. Lo bueno es que en cada canción, ibamos cambiando de pareja. Era una lástima cuando dejabas a alguién que bailaba como los ángeles y un alivio cuando alguién que te había pisado 50 veces se despedía de ti para no volver nunca. Os dejo un resumen de las fotos y un vídeo. Espero que os guste.
Tenía ganas de haber publicado este post antes, pero como todo a veces se tiene que posponer. Ayer por fin me senté y empecé a montar los vídeos y las fotos. Espero que haya merecido la pena.
El pasado 30 de junio como despedida de nuestros amigos Ali y Nestor nos dirigimos a una ciudad cerca de la Haya para realizar uno de los deportes acuáticos de moda: Wakeboard.
Pero, ¿qué es Wakeboard?
Es un deporte acuático en el cual se desliza sobre el agua encima de una tabla siendo arrastrado con una cuerda llamada palomier por una lancha, también puede hacer la misma función una moto acuática.
En nuestro caso, no éramos arrastrados por ninguna lancha, porque en el centro dónde se realizaba esta actividad ya tenía montado un entramado dónde nosotros sólo teníamos que seguir la cuerda.
Esto parece fácil, pero os prometo que no lo es. Al día siguiente, más de uno, incluida la servidora no nos pudimos mover de la cama.
Si estáis viviendo en Holanda, os aconsejo que lo intentéis. Es una buena tarde para pasar con los amigos. Pinchar aquí si queréis más información.
Os dejo un vídeo de las caídas. No hay mejor experiencia que aprender a reírse de uno mismo.
El fin de semana pasado tuve la oportunidad de viajar a dos de las ciudades con más encanto de Bélgica, Brujas y Gante.
Brujas creo que está subestimada pero Gante en cambio aunque podría decirse que es una ciudad similar, tiene algo que hace que para mi sobresalga por encima de todas las ciudades que he visitado en Bélgica.
Desde Rotterdam hacia Brujas
Si nos encontramos en la estación de Rotterdam Central, existen trenes aproximadamente cada hora hacia estas dos ciudades. El trayecto dura entre 2,30 y 3 horas, dependiendo si hacemos dos trasbordos o tenemos suerte y sólo hacemos uno.
El precio del billete fue de 41,60 euros (ida y vuelta). Para conseguir un descuento se puede hacer de dos formas diferentes:
1) Si vivimos en Holanda, es aconsejable conseguir la tarjeta anual que por un precio asequible de 50 euros al año, tendremos un descuento de 40 % en todos los viajes que realicemos en los Países Bajos. El problema de esto, es que no se aplica cuando son horarios punta durante la semana (antes de las 9:00 de mañana).
2) Existe un descuento de fin de semana si viajamos a los países del Benelux (Holanda, Bélgica y Luxemburgo). Es un 50 % de descuento. Nosotros escogimos esta opción, era más barato.
Os aconsejaría comprar el billete online e imprimirlo vosotros mismos. Como nosotros siempre lo hacemos todo en el último momento, tuvimos que pagar por cada uno de los billetes un suplemento de costes de administración. En resumen, ellos imprimieron el billete y por ellos nos cobraron casi 4 euros. ¿Os he dicho alguna vez cómo siento que este país te va rajando los bolsillos? Claro, siempre de forma legal, eso sí.
Brujas, localización en el mapa
Es la capital de la provincia de Flandes Occidental. Se encuentra a 90 km de Bruselas, y cuenta con una población de 117.000 habitantes.
El nombre proviene del noruego "Bryggia" (puentes, muelles, atracaderos). Si vas paseando a lo largo de la ciudad, podrás comprobar qué lo más llamativo y destacado de la ciudad es eso, sus puentes y muelles.
Su casco histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el 2000.
Al igual que Amsterdam y Estocolmo, Brujas es conocida como "la Venecia del Norte".
Qué ver en Brujas
Brujas es una ciudad antigua y pequeña, es difícil perderos alguno de sus detalles, pero si queréis saber lo más importante que debéis ver, es lo siguiente:
Plaza Mayor: También llamada Markt, esta plaza es el centro neurálgico de Brujas. En ella se sigue celebrando un mercado todos los sábados.
Belfort: Se encuentra en la plaza anterior y es la torre más característica de Brujas. Desde la parte más alta, a 83 metros de altura y tras subir 365 escalones, se obtienen las mejores vistas de la ciudad.
Burg: Segunda plaza más importante de la ciudad. Compite con la anterior en ser la más bella de Brujas.
Stadhuis: El edificio más característico del Burg es sin duda el Ayuntamiento. Su fachada data de finales del siglo XIV.
Onze Lieve Vrouwekerk: La Iglesia de Nuestra Señora es la iglesia más famosa de Brujas y su torre de 122 metros es la más alta de Bélgica.
Para las personas que os gusten los museos, Brujas tiene dos qué merece destacar: el Museo Gruuthuse, una mansión medieval que hace retroceder 5 siglos, y el Museo Groening, el museo de arte más importante de Brujas.
Si tenéis tiempo y no os importa pagar un poco más, os aconsejaría dar un paseo en barco por los canales, es precioso.
Cuánto tiempo dedicar a Brujas
Brujas tiene encanto. Aunque puede ser que después de unas horas por la ciudad, acabéis aburridos y queréis dirigiros a otra ciudad. Nosotros lo hicimos. Pero si en cambio queréis pernoctar allí, os aconsejaría visitar esta página sobre los diferentes hoteles que se encuentran en la ciudad.
Sentirse en casa
Cuando ibamos paseando, hay algo que nos llamo la atención continuamente. Sólo escuchábamos español. Podréis pensar que era una exageración, pero en mi vida había estado en una ciudad extranjera de habla no español y escuchar continuamente nuestro idioma. Nos preguntamos si esas personas se encontraban allí porque era época estival y entre los españoles es muy frecuente visitar Europa o en cambio eran también inmigrantes como nosotros y éramos otro ejemplo y consecuencia más de la crisis de nuestro país.
Hubo una calle en la qué no pudimos evitar hacernos una foto. Era llamativa, porque la calle se llamaba "calle del libro" y debajo la habían bautizado con el nombre de "calle del facebook". Los tiempos están cambiando, lo queramos o no.
GANTE, una ciudad maravillosa
Aunque su historia tiene puntos en común con la de Brujas, Gante siempre ha sabido conservar mejor su economía.
Es una ciudad industrial desde principios del siglo XIX y destaca por su Universidad dónde desde septiembre hasta junio hace que la ciudad se mantenga viva según sus habitantes.
Gante, localización en el mapa
Gante tiene 250.000 habitantes de los que 45.000 son sólo estudiantes, convirtiéndose en una de las ciudades más animadas del centro de Europa.
Al igual que Brujas, Gante también posee una interesante red de canales y un precioso centro urbano.
En los años 80, la ciudad sufrió una restauración para tratar de captar el turismo cómo ya lo hacía su ciudad vecina, Brujas.
Qué ver en Gante
Catedral de Gante (Sint-Baafskathedral): Los tres siglos que tardó en construirse valieron la pena.
No perdáis de vista el púlpito barroco del siglo XVIII y sus pinturas,
donde destaca "La Adoración del Cordero Místico" de Van Eyck. En este lugar fue bautizado Carlos V.
Castillo de Gante (Gravensteen):
Antigua residencia de los condes de Flandes, fue utilizado hasta el
siglo XIV como fortaleza defensiva y hasta el XVII como prisión,
actualmente el castillo es una visita imprescindible de Gante. Tiene un museo de instrumentos de tortura.
Stadhuis: Al igual que sucede en Bruselas y Brujas, el Ayuntamiento de Gante no pasa desapercibido.
Belfort: Este precioso campanario de 91 metros
fue construido en el siglo XIV y es una de las imágenes más conocidas
de Gante. Su mirador, a 65 metros de altura, ofrece las mejores vistas de la ciudad.
Iglesia de San Nicolás (Sint-Niklaaskerk): Situada a escasa distancia de la catedral, es la segunda iglesia más bonita de la ciudad.
Korenmarkt: Esta plaza, situada a las puertas de la iglesia anterior, ha sido el lugar más animado de Gante desde la Edad Media.
No os podéis perder en Brujas y Gante
-Cerveza: Bélgica es el país de la cerveza, por eso si sois amantes de ella, os aconsejaría si teneís la oportunidad de probar las siguientes:
BLANCHE DE NAMUR:Cerveza suave y refrescante de color amarillo. (4,5 %)
CHIMAY AZUL: Sabor intento a malta tostada, frutos dulces como la ciruela o la pera y, finaliza con un toque amargo (9 %)
DELIRIUM TREMENS: Sabor fuerte y amargo, el color es amarillo clarito, tal vez os arda el paladar cuando estéis probandola. (9 %)
DUVEL: Suave, con un cuerpo que llena la boca desde el primer trago y consigue el amargor justo. (8,5 %)
-Chocolate: Algunas personas lo consideran el mejor chocolate del mundo. Esto siempre es dependiendo de los gustos, pero lo qué no podemos negar, es qué es delicioso.
-Bicicletas: Al igual que los Países Belgas, Bélgica también es un país que destaca por el consumo de bicicletas. Si tenéis la oportunidad, podéis alquilar una de ellas en cualquiera de sus tiendas. Desde pequeños a mayores, a lo largo de la visita podéis comprobar que es una ciudad que está hecha para que demos un paseo.
-Tintín: ¿Quién no se acuerda del famoso Tintín y su inseparable perro Milú? En la serie, Tintín, un intrépido reportero belga de aspecto juvenil viajaba por todo el mundo junto su inseparable perro fox terrier blanco y se encontraba a personajes que han alcazado tanta celebridad como el capitán Haddock o el profesor Tornasol.
En estas dos ciudades podréis encontrar tiendas para comprar alguno de los souvenir de estos personajes.
Particularmente mi madre siempre colecciona cajas de todos los sitios que he visitado, en mi último viaje a Bruselas, encontré una caja de chocolates que incluía alguno de los personajes de la historia de Tintín. No pude evitar comprarlo porqué sabía que la encantaría.
Una despedida de soltera diferente en Gante
Qué los belgas son diferentes a los españoles, nadie lo puede negar, pero qué particularmente a mi me sorprenden, también es verdad.
Cuando estabámos visitando la ciudad, pudimos ver un grupo de chicas que celebraban la despedida de soltera de una de ellas. La celebración consistía en realizar juegos en medio de la plaza para pasar el tiempo juntas y me imagino que reírse un rato.
Todas llevaban atado a su cintura un hilo con un tampón (lo qué he escrito, un tampón) y el juego consistía en después de dar múltiples vueltas intentar meter ese tampón en la botella, agarrarlo y llevarlo hasta una fuente sin qué se rompiese.
Fue divertido y otra manera de ver que las belgas tiene una forma diferente de celebrar su última fiesta de solteras.
Espero qué os sirva de pequeña ayuda si alguna vez queréis visitar estas dos ciudades. Os recomiendo ver antes la película de Colin Farrel, In Brugge. Dos sicarios se esconden en Brujas hasta esperar instrucciones de su jefe. Se puede ver unos paisajes fabulosos de la ciudad, además de disfrutar de las interpretaciones de Colin Farrell y Ralph Fiennes.
