Turquía pide un cambio

Cariñosamente, una amiga me aconsejó que para mejorar el blog debería escoger una temática, es decir no podía hablar de todo. Tenía que definirme, blanco o negro. Asistimos a un mundo en el qué todo está clasificado. En el trabajo cada uno tiene su área dónde ejerce unas funciones delimitadas, no podemos salirnos ni un ápice. Estamos en una cadena de montaje, dónde no podemos perturbar el trabajo de otros. Vemos a diario como los blogs están divididos por secciones: política, cultura, música, moda...
Pero desgraciadamente, yo no soy una experta en nada. Pero me gusta saber de todo. Por tanto, permitirme en este blog dar rienda suelta a mi curiosidad y poderos mostrar mis pasiones.   

Turquía: un país desconocido

Turquía es un país al que me siento emocionalmente ligada. En 2011, durante unos meses tuve la oportunidad de trabajar en Estambul y poder conocer, aunque de forma limitada, la cultura y sus gentes. Antes de ir mucha gente me alertó de lo peligroso que podía ser este país. Ponían como referencia películas como Expreso de Medianoche o La Pasión Turca. Cuando llegué, me sorprendió lo cálido y acogedor que podía llegar a ser ese país.Desde mi compañero de piso hasta mis colegas de trabajo, hasta la gente que me encontré mientras caminaba perdida, todos fueron muy amables y atentos conmigo. Encontré personas preparadas, que enaltecían su bandera, su país, del que estaban muy orgullosos. Pero también eran críticos con el gobierno, aunque no mostraban en ese momento, ni un atisbo de preocupación por manifestarse en contra. 

El esperado cambio

Cuando pasé mis días en Estambul conversando con los que ahora llamo amigos, entre noches que se prorrogaban hasta al amanecer bebiendo té y fumando narguile, pude percibir que los turcos eran un pueblo pasivo con respecto a su Gobierno. Mientras que en esa época, en España estaba comenzado la conocida "Spanish Revolution" desde el 15-M. Yo observaba como este pueblo joven, preparado y sin problemas de desempleo, se quejaba continuamente de los cambios graduales que estaban ocurriendo en su país. Aunque el país es laico, legado del presidente más famoso que ha habido en Turquía, Mustafa Atatürk, cada vez en Estambul se podían ver más símbolos religiosos en las calles. Las taxas de alcohol iban incrementándose poco a poco y para los turcos resultaba inimaginable poder tener programas en la televisión dirigidos a la educación sexual. 

Turquía, un país que quiere ir hacia delante

De la Turquía que yo dejé en febrero del 2012, ha dado un salto de 180 grados. Tengo que decir irreconocible sintiendo un enorme orgullo al hablar del pueblo turco.

Gracias a mis amigos, he podido estar en contacto con la situación, aparte de seguir las noticias mediante medios audiovisuales e internet.

Según me han explicado, la destrucción del parque Gezi en la zona de Taksim ha sido la gota que ha colmado el vaso por parte del autoritarismo del gobierno presidido por el Ministro Recep Tayyin Erdogan. Según los últimos estudios, existen 93 centros comerciales sólo en la ciudad de Estambul "It is more irritating when they built it in historial areas or green areas".(Es más irritante cuando construyen en zonas verdes)", comenta uno de mis amigos que tuve la oportunidad de charlar estos días mediante Skype. 

Para el pueblo turco, Gezi tiene una parte sentimental ya que es una de las últimas áreas pequeñas verdes en el centro de la ciudad. 

Por tanto, unos pocos manifestatantes para proteger esa zona acamparon en forma de protesta pacífica. Ante ese acto democrático, la policía actuó de forma violenta hacia ellos con chorros de agua y gases lacrimógenos. El primer Ministro, en vez de pedir perdón al día siguiente, imploró un discurso más autoritario y llamó terroristas a las personas que se manifestaron. Ésto desembocó en un levantamiento por parte del pueblo turco, sobretodo de la mayoría de los jóvenes. Todos salieron a la calle para protestar la dimisión del Primer Ministro. 

¿Realismo o pesimismo?

Aunque el pueblo turco aplaude la posición que está adoptando la Unión Europea apoyando a los manifestantes "I do not think they can do much. Erdogan has already ignored European Parliaments decision about protests (No pienso que ellos puedan hacer mucho. Erdogan ha ignorado las decisiones de los parlamentarios sobre los protestantes) afirma mi compañero de piso. 

Saben la importancia que Turquía ha adoptado económicamente hablando estos últimos años, siendo observadores del declive y la recesión que está sufriendo la Unión Europea. Aunque no se exculpan, de no haber mostrado antes el desacuerdo ante las políticas conservadoras del Gobierno.

Besarse en público, el aborto, el sexo, no está visto bien por la sociedad más conservadora, cada vez adoptando más símbolos religiosos como el velo en las mujeres,desde que ganase las elecciones el partido AKP (Partido de la Justicia y el Desarrollo) de Erdogan en 2003. Cuando tuve la oportunidad de preguntar sobre el Gobierno a gente fuera de mi círculo de amistades en Estambul, percibía que la gente era reacia a hablar sobre la oposición a las políticas, se palpaba en el ambiente la falta de libertad de expresión.

Nadie duda del carácter de líder de Erdogan y que éste, ha sabido enfrentarse y hacerse amigo de sus países vecinos usando Turquía como punto estratégico y que sea una de las potencias en la actualidad que economicamente más está creciendo. Pero aceptando esto, también han estado de acuerdo en el autoritarismo de este líder, mermando sus derechos progresivamente sin que el pueblo turco le reprochasen el cambio. Este último mes, Erdogan ha demostrado públicamente que no se arrepiente de sus actos, ha insultado a los manifestantes llamándoles terroristas y todavía no ha pedido perdón por los 4 muertos y hasta 7000 heridos que las manifestaciones y los actos policiales han dejado. 

Los turcos dudan del desenlance que comenzó en un parque pero que encendió la mecha en todo el país. Aunque no están seguros que Erdogan deje el gobierno, algunos tienen esperanza que el partido de la oposición CHP liderado por Cumhuriyet Halk Partisi pueda ganar las siguientes elecciones. El resto de países seguimos esperando y siempre apoyando al pueblo turco por la lucha de sus derechos. La mecha está encendida y es imposible apagarla.

 A continuación os muestro el himno que ondea la lucha que el pueblo turco está ejerciendo en contra del Gobierno. Espero que esto no se relegue a un segundo plano y podamos ver el cambio tan deseado que el pueblo está esperando.

 

 "Primero vinieron a buscar a los comunistas, y yo no hablé porque no era comunista. 

Después vinieron por los socialistas y los sindicalistas, y yo no hablé porque no era lo uno ni lo otro.

Después vinieron por los judíos, y yo no hablé porque no era judío. 

Después vinieron por mí, y en ese momento ya no quedaba nadie que pudiera hablar por mí"

BERTOLT BRECHT